Con pocos elementos podemos crear estos ricos buñuelos. Nuestra propuesta es comenzar a integrar ingredientes que la naturaleza nos brinda, pero que ignoramos que son útiles para nosotros. Estos ingredientes tienen muchas propiedades además de alimentarnos
INGREDIENTES
4 tazas de llantén, hojas de diente de león y hojas tiernas de acelga bien picadas
1 pimiento rojo picado (morrón, ají dulce)
1 cucharada de ciboulette picado
1 cucharada de tomillo
200 gramos de tofu cortado en cubos pequeños
¾ taza de agua caliente
1 cucharada de pimentón dulce
1 taza de harina de garbanzo (120 gramos)
½ cucharadita de jengibre en polvo
1 cucharada de salsa de soja
2 huevos
1 cucharada de vinagre de vino
1 cucharadita de polvo de hornear (levadura química, leudante)
PREPARACIÓN
Poner en un recipiente, la harina de garbanzo, el polvo de hornear, el pimentón dulce, el tomillo y el jengibre.
Agregar las hojas picadas, el pimiento picado, el ciboulette picado, el tofu cortado en cubo y mezclar.
Incorporar los huevos previamente mezclados, la salsa de soja, el vinagre y el agua caliente.
Revolver continuamente hasta que esté todo integrado y se forme una pasta bastante consistente.
Poner aceite en una cacerola chica y con bordes altos.
Llevar a calentar sin que llegue a hervir.
Formar los buñuelos retirando parte de la masa con una cuchara y poniéndola en el aceite.
Dejar que los buñuelos se cocinen en el aceite hasta que estén dorados.
Apoyarlos sobre papel absorbente y servirlos calientes.